El peso mexicano es una moneda susceptible a los choques de los mercados debido a que es una de las divisas emergentes más utilizadas ya que es un país exportador de petróleo y participa en diversos tratados comerciales como el T-MEC.
Por ello, un peso caro o barato tiene sus pros y sus contras en la economía nacional. Actualmente esta moneda está en su nivel más bajo en comparación con el dólar en casi siete meses, señala información de Expansión.
¿Quién gana con un peso barato?
Cuando el peso pierde frente al dólar se benefician aquellos que venden sus productos y servicios en el extranjero.
El director general de Grupo Financiero BASE, Julio Escandón, explicó que los exportadores, como el sector maquilador venden y cobran en dólares, lo que incrementa sus flujos monetarios.
Por otro lado, el codirector de inversiones en Franklin Templeton México, Luis Gonzali, apuntó que esto también le resulta benéfico a las finanzas gubernamentales ya que alrededor del 15% del ingreso del gobierno proviene de la exportación de petróleo, por lo que un peso débil va a generar más utilidades.
¿Quién pierde?
La depreciación del peso frente al dólar afecta a los importadores, pues el costo de la materia prima para la elaboración de artículos terminados o los productos finales y servicios que compran del extranjero se encarecen.
No obstante, Gonzali explicó que estos movimientos no se traducen en presiones inflacionarias ni en los márgenes de las empresas de manera inmediata, pues estos cambios duran uno o dos meses y las empresas los pueden evitar consumiendo parte de sus inventarios.
¿Cómo hacer frente a escenarios de un peso débil?
Los especialistas consultados por Expansión señalaron que cuando el peso pierde frente al dólar, los importadores tienen tres opciones:
- Sacrificar ganancias para evitar perder mercado por encarecer sus productos.
- Contratar coberturas cambiarias.
- Hacer compras por adelantado.
En el caso de los grandes productores que dependen de materias primas agrícolas utilizan derivados para eliminar riesgos con el tipo de cambio y del costo de la materia prima, comprando a través de futuros, comentó el Codirector Franklin Templeton México.
Con información de Expansión.
