México debe llegar al 2026 con una agenda proactiva para revisión del T-MEC

Ante la próxima revisión del T-MEC en 2026, especialistas coincidieron en que el país debe prepararse con visión estratégica, coordinación interinstitucional y enfoque tecnológico

Ante la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026, especialistas coincidieron en que el país debe prepararse con visión estratégica, coordinación interinstitucional y enfoque tecnológico para consolidar su liderazgo en la región. 

Así se expuso durante el panel “Conectando mercados: Estrategias disruptivas para un comercio exitoso”, celebrado en el XXXI Congreso de Comercio Exterior Mexicano del Comce Nacional.

Los estados, clave en la nueva diplomacia comercial

Marco Antonio Del Prete Tercero, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable de Querétaro, destacó el papel de los gobiernos estatales en el fortalecimiento de las cadenas productivas y la diplomacia económica subnacional.

Recordó que las 32 secretarías de desarrollo económico trabajan junto con la Secretaría de Economía, encabezada por Marcelo Ebrard, para aportar propuestas regionales en la revisión del T-MEC.

El sector privado pide anticiparse a una revisión profunda

Para Kenneth Smith, presidente del Comité Empresarial Bilateral México-Estados Unidos del Comce, México debe estar preparado para una revisión administrativa o incluso una renegociación parcial del tratado.

El especialista advirtió que llegar sin presiones arancelarias sería “ideal” y que la postura mexicana debe centrarse en mantener el libre comercio y fortalecer las cadenas productivas frente a China.

También propuso avanzar hacia una política trilateral de defensa comercial, regulación compartida en inteligencia artificial, impulso de energías renovables y financiamiento espejo para pymes en los tres países.

Industria automotriz: modelo de integración regional

El presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), Francisco González Díaz, destacó que el sector automotriz es ejemplo del éxito del T-MEC y enfrenta una nueva etapa marcada por la electromovilidad, la inteligencia artificial y la innovación tecnológica.

González indicó que la INA colabora con el Banco Mundial, Bancomext y la AMPIP para fortalecer proveedores, certificar empresas y desarrollar talento especializado. 

Por su parte, Del Prete subrayó que la educación técnica será el motor de la competitividad: “El reto es pasar de apretar el botón a diseñarlo”.

Hacia un T-MEC 2.0

Los panelistas coincidieron en que México debe construir una agenda propositiva rumbo a 2026, basada en educación, innovación, sustentabilidad y certeza jurídica.

Aunque el concepto de nearshoring ha perdido fuerza mediática, González Díaz consideró que recobrará impulso cuando exista estabilidad política y regulatoria.

Con información de T21.