El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció que los altos aranceles impuestos a China “no son sostenibles” a largo plazo, en medio del aumento de tensiones entre ambas potencias antes de su reunión prevista con el presidente chino Xi Jinping, durante la próxima cumbre de la APEC en Corea del Sur.
En entrevista con Fox Business, Trump explicó que los gravámenes (que en algunos casos alcanzan hasta 145% sobre las importaciones chinas) podrían mantenerse temporalmente, aunque admitió que fueron una medida forzada por las circunstancias.
El conflicto arancelario entre Washington y Pekín ha generado una cadena de represalias que amenaza con afectar el comercio global y avivar riesgos de recesión.
Actualmente, los aranceles están suspendidos bajo una tregua de 90 días que expira el 10 de noviembre, salvo que se prorrogue nuevamente.
El diálogo entre ambos países se ha complicado por la ampliación de restricciones tecnológicas de Washington y las medidas de control de exportaciones chinas sobre tierras raras, esenciales para la industria tecnológica.
Trump advirtió la semana pasada que podría imponer un nuevo arancel del 100% a productos chinos y canceló temporalmente su encuentro con Xi. No obstante, expresó confianza en lograr un “acuerdo justo” con Beijing.
Por su parte, el director del Consejo Económico Nacional, Kevin Hassett, afirmó que confía en que Trump y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, logren un entendimiento que beneficie a ambos países, en un intento por estabilizar las relaciones comerciales entre las dos economías más grandes del mundo.
Con información de El Financiero.
