La Secretaría de Economía (SE) informó que las consultas públicas previas a la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) avanzan hacia un consenso nacional sobre las prioridades que el país deberá atender en el proceso programado para 2026.
Del 6 al 10 de octubre, la dependencia realizó mesas de trabajo con sectores productivos como madera-mueble y papel, bebidas y alimentos procesados, plásticos y juguete, y minería, además de encuentros en Guerrero, Tlaxcala, San Luis Potosí, Querétaro y Nuevo León.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que el ejercicio forma parte del proceso consultivo interno, que se desarrolla en paralelo en Estados Unidos y Canadá, con el fin de evaluar el funcionamiento del tratado y construir una postura común con legitimidad interna.
La SE también distribuyó cuestionarios sectoriales para recabar información de empresarios, cámaras, asociaciones y académicos, con el propósito de realizar un análisis estadístico por capítulos del T-MEC.
Sobre este tema, el secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), José Manuel Salazar-Xirinachs, expresó su confianza en la continuidad del acuerdo, pese a las tensiones comerciales globales.
Señaló que la interdependencia productiva de América del Norte hace probable una renegociación exitosa, destacando que más del 80% de las exportaciones mexicanas se dirigen a Estados Unidos.
A julio de 2025, estas alcanzaron 309,749 millones de dólares, un 6.5% más que en el mismo periodo del año anterior.
Durante la presentación del informe Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo en América Latina y el Caribe, Salazar-Xirinachs advirtió que la región enfrenta un riesgo de tercera década perdida si no fortalece su política productiva e institucional. Subrayó la necesidad de una mayor coordinación entre gobiernos, empresas y academia para ejecutar estrategias de desarrollo industrial.
Por su parte, el oficial de la Cepal en México, Jorge Mario Martínez-Piva, destacó el papel del Plan México, impulsado por el gobierno de Claudia Sheinbaum, como una herramienta clave para fortalecer la integración de insumos nacionales y reducir la vulnerabilidad externa.
En el sector minero, Carlos Pascual, vicepresidente senior de S&P Commodity Insights y exembajador de Estados Unidos en México, señaló que la renegociación del T-MEC representa una oportunidad estratégica para América del Norte debido a su combinación de minerales y metales críticos para industrias como la automotriz, aeroespacial e inteligencia artificial.
Advirtió, sin embargo, que la incertidumbre energética y regulatoria en México podría limitar las inversiones necesarias.
Pascual enfatizó que la competitividad regional depende de mantener condiciones de certidumbre y apertura a la inversión privada, tanto en minería como en energía, sectores fundamentales para el desarrollo industrial y la integración regional.
También recordó que, a partir de este año, los generadores eléctricos privados en México no podrán aportar más del 46% de la energía nacional, lo que incrementa la necesidad de claridad regulatoria para futuros proyectos conjuntos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Según el especialista, la revisión del tratado en 2026 estará marcada por la prioridad de Estados Unidos en materia de seguridad nacional, lo que podría influir en las negociaciones comerciales con México y Canadá.
Con información de Forbes México, El País y El Economista.
