La imposición de un arancel del 50% al acero mexicano por parte de Estados Unidos provocó una caída del 60% en las exportaciones del sector hacia ese país en abril, según cifras del Instituto Americano del Hierro y el Acero.
México, tercer proveedor de acero para su vecino del norte, fue el más afectado frente a Canadá (-13%) y Brasil (-30%).
Ante el impacto, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó la medida como injusta y sin sustento legal, al señalar que México mantiene un déficit comercial en este rubro y que el acero forma parte de cadenas productivas compartidas con Estados Unidos.
La mandataria subrayó que el gobierno buscará un acuerdo bilateral para revertir la medida y proteger empleos e inversiones.
Marcelo Ebrard, secretario de Economía, encabeza las negociaciones con autoridades estadounidenses, mientras la industria nacional exige respuestas.
Piden aplicar medidas recíprocas
Por su parte, la Coparmex llamó al gobierno mexicano a aplicar medidas recíprocas y recordó que el 75% del acero producido en México se exporta a EE. UU., país que registró un superávit de 4 mil millones de dólares en este comercio bilateral en 2024.
El presidente estadounidense, Donald Trump, justificó el nuevo arancel como parte de su agenda para proteger a la industria siderúrgica nacional y garantizar la rentabilidad de la reciente compra de US Steel por Nippon Steel.
No obstante, estudios del Instituto Peterson advierten que medidas similares aplicadas en 2018 encarecieron la cadena productiva sin mejorar sustancialmente la competitividad ni el empleo en el sector estadounidense.
Mientras tanto, México aguarda una respuesta formal de Washington. De no alcanzarse un acuerdo, el gobierno ha anticipado que responderá con acciones para proteger a la industria nacional.
Con información de Expansión y El Universal.