Las exportaciones de aguacate desde México alcanzarán un nuevo máximo histórico en 2025, con un valor proyectado de 4,000 millones de dólares (mdd), según estimaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
En 2024, los envíos internacionales de este fruto sumaron 3,787 mdd, un aumento de 20.1% respecto a 2023. En términos de volumen, las exportaciones alcanzarán 1.34 millones de toneladas métricas en 2025, lo que representa un incremento interanual del 5%.
Durante 2024, el volumen estimado fue de 1.28 millones de toneladas métricas, una disminución de 9% frente a 2023, atribuida a mayores costos logísticos y fluctuaciones en la cosecha.
De ese total, 1.07 millones de toneladas métricas se destinaron a Estados Unidos, el principal destino del aguacate mexicano, aunque con una caída de 5% frente al año anterior.
Estados Unidos lidera como destino de exportación
El mercado estadounidense absorbe más del 80% del volumen total exportado, seguido de Canadá (7%) y Japón (3%). La temporada alta ocurre entre diciembre y febrero, concentrando más del 35% de las exportaciones anuales, coincidiendo con eventos de alta demanda como el Super Bowl.
En 2024, México proveyó el 88% del aguacate importado por EE. UU.. La variedad Hass continúa siendo la más demandada a nivel internacional por su sabor, textura y durabilidad.
Los aguacates fueron el tercer producto agrícola más exportado por México en 2024, solo detrás de la cerveza y el tequila, y superando a las bayas y tomates.
Producción nacional en crecimiento
El USDA proyecta que la producción de aguacate en México alcanzará 2.75 millones de toneladas métricas en 2025, un crecimiento de 3% frente a 2024, impulsado por condiciones climáticas favorables, mejoras agrícolas y alta demanda de exportación.
La superficie sembrada se mantendrá estable en 256,500 hectáreas, alineada con regulaciones sobre uso del suelo y el programa de certificación libre de deforestación en Michoacán.
Importaciones mexicanas en descenso
México no es un gran importador de aguacate. Las importaciones se estiman en 3,800 toneladas métricas en 2025, una baja respecto a las 4,200 toneladas métricas de 2024. Las compras provienen principalmente de Perú y Colombia, para cubrir la demanda durante los periodos de baja producción.
El nivel más alto de importaciones se registró en 2022, con 5,550 toneladas métricas, debido a problemas de disponibilidad de agua e insumos que afectaron la producción interna.
Con información de el Economista.