El nuevo arancel del 25% impuesto por Estados Unidos a las importaciones de vehículos y autopartes desde México y Canadá podría representar un aumento de costos superior a 42 mil millones de dólares (mdd) para los tres grandes fabricantes automotrices estadounidenses: Ford, General Motors y Stellantis, según un análisis del Centro de Investigación Automotriz (CAR), con sede en Michigan.
Impacto estimado por empresa:
- 6.8 millones de vehículos anuales producidos por GM, Ford y Stellantis se verán afectados.
- A nivel de la industria automotriz en EE. UU., se estima que el total de vehículos afectados asciende a 17.7 millones.
- Cada automóvil importado podría implicar 8 mil 600 dólares adicionales en aranceles, y los autos producidos localmente con piezas extranjeras, hasta 5 mil dólares adicionales por unidad.
Complejidad de la cadena de suministro
Venkatesh Prasad, vicepresidente sénior de Investigación y director de Innovación de CAR, explicó que la cadena de valor automotriz es global y altamente integrada, lo cual complica medir el origen preciso de cada componente y, por ende, calcular el impacto de los nuevos gravámenes. Muchos vehículos ensamblados en EE. UU. dependen de partes fabricadas en México o Canadá.
Posición de los fabricantes
Por su parte, Matt Blunt, presidente del Consejo Americano de Política Automotriz (AAPC) —que agrupa a Ford, GM y Stellantis—, afirmó que las compañías están comprometidas con mantener el diálogo con la administración estadounidense para encontrar soluciones que fomenten la producción nacional sin afectar la competitividad del sector.
El AAPC reconoció que, aunque comparte el objetivo de reforzar la industria automotriz de EE. UU., los aranceles generalizados podrían afectar gravemente la viabilidad económica de muchas empresas y alterar la cadena de suministro, cuya reconfiguración requerirá tiempo y grandes inversiones.
Con información de El Economista.