Presionan automotrices a Trump para evitar aranceles

Fabricantes de automóviles en Estados Unidos, como Ford, General Motors y Stellantis, están presionando a Trump para que excluya ciertas piezas de los nuevos aranceles. 

Fabricantes de automóviles en Estados Unidos, como Ford, General Motors y Stellantis, están presionando a la administración del presidente Donald Trump para que excluya ciertas piezas automotrices de los nuevos aranceles. 

Según fuentes cercanas, las empresas han sostenido reuniones con la Casa Blanca, el Departamento de Comercio y el Representante de Comercio de EE. UU., argumentando que los aranceles sobre piezas importadas, muchas de ellas provenientes de países de bajo costo como México, aumentarían los costos en miles de millones de dólares y provocarían despidos.

Los gravámenes, que incluyen un 25% para vehículos completamente ensamblados y componentes, entrarán en vigor el 3 de abril. 

Aunque las empresas estarían dispuestas a pagar aranceles por autos terminados y grandes partes como motores, buscan evitar que las medidas afecten piezas menores, cuya fabricación suele hacerse en el extranjero.

El presidente Trump confirmó su reunión con John Elkann, presidente de Stellantis, y se sabe que Bill Ford, CEO de Ford, se reunió recientemente con el secretario de Comercio, Howard Lutnick. 

Los fabricantes advierten que los aranceles podrían elevar aún más los precios de los vehículos, que ya rondan los 50 mil dólares, y reducir la demanda en el mercado estadounidense.

Ante la incertidumbre, varias compañías han aumentado inventarios de autos y los consumidores se han adelantado a comprar antes de que entren en vigor los nuevos impuestos. 

Mientras tanto, la industria automotriz continúa presionando para obtener alivios específicos que permitan mantener la competitividad sin afectar la producción nacional.

Con información de Reforma.