El Gobierno de México analiza imponer aranceles a productos chinos como parte de las negociaciones con Estados Unidos para evitar un gravamen del 25% a las exportaciones mexicanas, anunciado por el presidente Donald Trump. 

La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que funcionarios de la Secretaría de Economía y Hacienda permanecen en Washington para avanzar en las conversaciones.

Sheinbaum destacó la importancia de fortalecer el T-MEC y recordó que México no tiene un tratado de libre comercio con China, lo que permitiría imponer aranceles sin violar normas de la OMC. 

“Nosotros siempre hemos planteado priorizar los acuerdos comerciales con países con los que tenemos tratados”, señaló.

Kenneth Smith, socio de Agon, explicó que esta medida responde a una demanda de EE.UU., que acusa a México y Canadá de permitir la “triangulación” de productos chinos. 

“El gobierno de México ha negado que exista triangulación, pero es un hecho que se han incrementado los aranceles a muchos productos que afectan exportaciones chinas”, afirmó.

Según John Soldevilla, director de ECOBI, México importó 253 mil 519 millones de dólares (mdd) desde Asia en 2024, el 51.2% de China, lo que le daría margen para aplicar aranceles a otras naciones como India, Malasia, Tailandia y Taiwán.

Carlos Véjar, socio de White & Case México, señaló que México puede elevar aranceles sin violar compromisos internacionales, ya que el promedio consolidado en la OMC es del 30-45 %, mientras que el país actualmente aplica tasas que no superan el 11 %. 

No obstante, advirtió que cualquier decisión debe ser cuidadosa para evitar represalias comerciales de EE.UU.

La presencia de Hacienda en las negociaciones sugiere que el gobierno analiza el impacto fiscal de posibles medidas, señaló Véjar. 

Kenneth Smith añadió que también podría estar evaluando el déficit comercial con China, un tema recurrente en las discusiones bilaterales.

Con información de El Financiero.