IED en autopartes bate récord

El sector de autopartes en México crece aceleradamente, superando la inversión en nuevas plantas ensambladoras.

El sector de autopartes en México crece aceleradamente, superando la inversión en nuevas plantas ensambladoras. Mientras que la manufactura de vehículos ha disminuido, el país se consolida como el cuarto mayor productor de autopartes a nivel mundial.

Desde 2015 no se han confirmado nuevas plantas de ensamblaje, pero fabricantes como GM, Nissan y Toyota han modernizado sus instalaciones. GM invirtió mil millones de dólares (mdd) en Ramos Arizpe para vehículos eléctricos. 

En 2023, la IED en autopartes alcanzó 2 mil 550 mdd, según la Industria Nacional de Autopartes (INA), con un crecimiento proyectado del 25.4% en 2024. Además, destacó que México es el principal proveedor de autopartes para EE.UU., con el 43.18% de sus importaciones.

El T-MEC ha impulsado este crecimiento al incrementar el Valor de Contenido Regional al 75%, señala Manuel Montoya, director del Clúster Automotriz de Nuevo León. 

El 87% de las autopartes exportadas tienen como destino EE.UU. Juan Francisco Torres Landa, de Hogan Lovells México, destaca la integración regional como clave del éxito.

Incertidumbre arancelaria ralentiza inversiones

La imposición del 25% de aranceles al sector automotriz genera incertidumbre y provocará una ralentización en las inversiones proyectadas para la transición a la electromovilidad y el nearshoring, afirmó la INA.

Gabriel Padilla, director general del organismo, señaló que decisiones de inversión programadas para el primer semestre de 2024 se postergarán hasta finales de 2025. Sin embargo, el sector aún prevé captar 2 mil mdd en IED en 2025, tras reuniones en Las Vegas con empresarios de tecnología de semiconductores y baterías de litio.

Aunque la incertidumbre afectará el ritmo de inversión, Padilla confía en una recuperación una vez que haya certeza sobre el T-MEC y su revisión en 2026. También advirtió sobre los costos asociados a los aranceles, especialmente en acero y aluminio, que representan hasta el 60% del peso de un vehículo.

En reuniones con directivos de armadoras como Ford, se ha señalado que los aranceles generarán costos adicionales y afectarán la industria, aunque México tiene capacidad para el abastecimiento. El problema principal será el aumento de precios, concluyó Padilla.

No obstante, Gerardo Gómez, de J.D. Power México, considera que el país mantiene estándares de producción competitivos a nivel global.

Con información de Expansión y El Economista.