La Inversión Extranjera Directa (IED) mundial disminuyó un 8% en 2024, excluyendo los flujos financieros a través de economías de tránsito, como las europeas.
Si se incluyen estas economías, la IED mundial creció un 11%, alcanzando 1.4 billones de dólares, según la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
En América Latina y el Caribe, los flujos de IED cayeron un 9%, alcanzando los 173,000 millones de dólares.
Brasil, el principal receptor de la región, registró una caída del 5%, aunque países como Brasil, Argentina y Colombia aumentaron el número y valor de sus proyectos nuevos, lo que sugiere posibles aumentos en el futuro.
En contraste, México experimentó un crecimiento del 11% en las entradas de IED, aunque los anuncios de nuevos proyectos fueron débiles.
Por su parte, en América del Norte, la IED aumentó un 13%, impulsada principalmente por un incremento del 80% en las fusiones y adquisiciones en Estados Unidos.
Este país también registró un aumento del 93% en los proyectos nuevos, especialmente en semiconductores, alcanzando los 266,000 millones de dólares.
En Europa, la IED disminuyó un 45%, con caídas significativas en Alemania (-60%) e Italia (-35%).
En Asia, la IED cayó un 7% en las economías en desarrollo, con China registrando una caída del 29%.
Sin embargo, la ASEAN experimentó un aumento del 2%, alcanzando un récord de 235,000 millones de dólares, y la India vio un crecimiento del 13% en los flujos de IED y nuevos proyectos.
Con información de El Economista.