Este mes se celebró el primer aniversario de la actualización de la tabla de enfermedades de trabajo en México, una herramienta importante para el diagnóstico de padecimientos laborales que no se había modificado en más de 50 años.
La reforma incluyó 88 nuevas enfermedades relacionadas con el trabajo, tales como trastornos mentales, enfermedades de la mujer como la endometriosis, el Covid-19 y un aumento en los tipos de cánceres laborales, que pasaron de cuatro a 30.
Hosanna Rodríguez Morales, presidenta de la Asociación Latinoamericana de Salud Ocupacional, destacó que la actualización ha impulsado una mayor cultura de prevención y conciencia en las empresas sobre los riesgos laborales.
Asimismo, Heriberto Pérez González Aragón, presidente de la Federación Nacional de Salud en el Trabajo (Fenastac), señaló que la nueva tabla ha facilitado el conocimiento de las patologías, ayudando a fortalecer la prevención en los lugares de trabajo.
La modificación también ha permitido que los médicos ocupacionales cuenten con una guía más precisa para diagnosticar y prevenir enfermedades laborales, alineada con la Clasificación Internacional de Enfermedades CIE-11 de la OMS.
Sin embargo, expertos coinciden en que persisten desafíos, como la prevención de trastornos mentales y musculoesqueléticos, y la necesidad de mejorar la capacitación de los profesionales en salud ocupacional.
Ambos coinciden en que la prevención debe ser vista como un esfuerzo conjunto entre el sector privado y el público, y subrayan la importancia de tratar al trabajador de manera integral.
Con información de El Economista.