Limitar las importaciones de maíz, como propone el gobierno federal, podría resultar en un segundo panel de controversias bajo el T-MEC, advirtió Kenneth Smith, ex jefe de la negociación técnica para este acuerdo en la Secretaría de Economía (SE).
Smith destacó que la reforma, que restringe la entrada de maíz genéticamente modificado a solo maíz quebrado, violaría el Tratado al imponer barreras adicionales para la importación de maíz transgénico.
El 14 de agosto, la Cámara de Diputados aprobó modificaciones a los artículos 4 y 27 constitucionales, permitiendo solo la importación de maíz genéticamente modificado en forma quebrada para evitar su siembra en México.
Juan Carlos Anaya, director general de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), indicó que la reforma podría elevar los costos para los compradores pecuarios e industriales en aproximadamente 15 dólares por tonelada y afectar la productividad ganadera al limitar el uso de maíz rolado, que ofrece mayores beneficios nutricionales.
Smith también mencionó que estas restricciones podrían causar problemas significativos y costos elevados para los usuarios de maíz en México, que importa más de 18 millones de toneladas de maíz amarillo de Estados Unidos.
Con información de Reforma.