La economía de México enfrenta un panorama con desafíos marcados por una desaceleración en su crecimiento, un consumo privado que puede estar en declive y el posible triunfo de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos.

Ana Azuara, gerente de Análisis Económico de Banco BASE, analizó estos y otros factores durante la sesión informativa Expectativa sobre Crecimiento Económico en julio 2024, organizada por la Asociación Nacional Incomex.

Impacto de Estados Unidos

Consideró que el crecimiento económico y las políticas de Estados Unidos tienen un impacto significativo en la economía de México.

La posible victoria de Donald Trump en las próximas elecciones estadounidenses representa un riesgo, ya que ha planteado reducir las tasas de impuestos corporativos del 21% al 15%, lo cual podría afectar el nearshoring en México.

Además, Trump ha mencionado la imposición de aranceles del 60% al 100% en importaciones desde China y en productos automotrices, incluidos los fabricados en México. Estos factores podrían perjudicar al sector automotriz mexicano, que es crucial para las exportaciones del país.

Desaceleración Económica

Por otro lado, señaló que la economía de México se está desacelerando de manera significativa. En el segundo trimestre del año, según datos del Inegi el crecimiento fue de solo 0.2%.

Esta situación ha llevado a Banco BASE a recortar sus expectativas de crecimiento económico para el país de 1.6% a 1.3%.

Perspectivas de Crecimiento

Para el próximo año, se espera una desaceleración adicional en el crecimiento económico de México, con un crecimiento estimado cercano al 0.8%. Esta desaceleración es típica después de años electorales, cuando se producen recortes en el gasto para ajustarse a la nueva situación económica.

Durante la primera mitad del año, el crecimiento económico ha sido de un 0.3% en el primer trimestre y 0.2% en el segundo trimestre. Para alcanzar un crecimiento del 1.6%, México tendría que crecer al menos un 0.7% en cada uno de los trimestres restantes del año, lo cual Azuara señaló como improbable.

Consumo Privado

El consumo privado en México también está mostrando signos de desaceleración, a pesar de la entrada de remesas y un empleo sostenido.

La inflación sigue siendo alta y las tasas de interés del Banco de México permanecen elevadas, lo que afecta negativamente el consumo. Además, la cartera vencida de crédito al consumo está creciendo, lo que indica que las personas están solicitando créditos pero no los están pagando, lo que podría llevar a una contracción del consumo en el futuro, ya que a las personas en cartera vencida se les dificultará obtener nuevos créditos.

Exportaciones

Las exportaciones han sido el principal motor de la economía mexicana, pero su crecimiento acumulado también se está desacelerando, tanto en exportaciones como en importaciones.

El sector automotriz sigue siendo fundamental para las exportaciones de México y la economía del país.

Inflación

Azuara indicó que la inflación en México se ha acelerado, aunque sigue estando controlada.

La inflación general y la inflación subyacente han aumentado debido a problemas en el sector agrícola, incluyendo afectaciones por lluvias, huracanes y plagas como el virus del dragón amarillo que afecta la cosecha de limón.

Además, el aumento significativo en los precios de la gasolina es un factor delicado para la economía mexicana.

Indicó que la inflación a tasa anual se ubicó en mayo en 4.65% y en junio en 4.98%, cerrando julio en 5.54%. Para agosto se espera que cierre en 5.35% y en septiembre en 5.31%. Para el cierre de año, es decir, en diciembre, Banco BASE proyecta que se ubique en 4.95% y arranque el 2025 en 4.69%.

Tasas de Interés

Comentó también que no se espera que México alcance el objetivo de inflación del Banco de México este año ni el próximo, y se prevé que este objetivo se logre hacia 2026.

A pesar de ello, se espera que recorte en la tasa de interés a finales de año, aunque podría ser menor de lo planeado debido a la inflación.

La economía de México enfrenta múltiples desafíos, incluyendo una desaceleración del crecimiento, un consumo privado debilitado y una inflación persistente. Las exportaciones y el sector automotriz siguen siendo fundamentales para la economía mexicana, sin embargo, la situación económica general requiere atención y medidas adecuadas para enfrentar los riesgos internos y externos.

Con información de Banco BASE