El puerto de Manzanillo, ubicado en Colima, México, desempeña un papel crucial en el comercio y la inversión del país, manejando alrededor del 70% de las importaciones nacionales
Después de superar los desafíos logísticos causados por la pandemia de Covid-19 y las interrupciones en las cadenas de suministro, el puerto está experimentando un crecimiento significativo en la actividad portuaria.
De acuerdo con José Antonio Contreras, director de Contecon Manzanillo, este 2023 este recinto ha registrado un aumento en su actividad portuaria y ha establecido récords de movimiento de contenedores, tendencia que se espera que continúe en 2024.
En julio de 2023, se manejó un volumen récord de 330 mil contenedores de 20 pies (TEU), lo que representa un crecimiento de más del 50% en comparación con principios de 2020, antes de la pandemia.
Un hito importante ocurrió cuando Contecon Manzanillo recibió un buque de 400 metros de eslora en agosto de 2023.
Esto convirtió a Manzanillo en el primer puerto de América Latina en recibir un buque de tal tamaño, demostrando la capacidad y la inversión en infraestructura del puerto.
Este aumento en la actividad portuaria también ha sido impulsado por el crecimiento en la carga contenerizada. La presencia del buque de gran tamaño validó la tendencia de crecimiento en este tipo de carga.
La línea naviera francesa CMA, propietaria del buque, estableció un servicio regular en Manzanillo, lo que subraya la importancia del puerto en el comercio marítimo.
A pesar de que otros puertos en la región, como Los Ángeles, Long Beach y Lázaro Cárdenas, están experimentando disminuciones en la actividad, Manzanillo está creciendo.
La participación de Manzanillo en el manejo de la carga contenerizada en México está en aumento y se espera que crezca de aproximadamente el 42% al 45% este año.
Contecon Manzanillo tiene planes de inversión en la terminal, con una inversión de 230 millones de dólares en la fase tres y planes para la fase cuatro.
Se espera que la demanda de insumos importados aumente debido al crecimiento de la capacidad productiva en el país, lo que tendrá un impacto positivo en el negocio portuario y en la economía en general.
Con información de El Economista.