La industria siderúrgica mexicana promueve en Estados Unidos una integración de la cadena productiva para mantener la relación comercial entre ambos países en el mediano y largo plazo a través de una tendencia conocida como “friendshoring”.
Así como el nearshoring busca acercar plantas productivas a los centros de proveeduría y consumo, el “friendshoring” busca trasladar esas operaciones a países aliados o amigos.
El presidente de la Cámara de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero), David Gutiérrez Muguerza, declaró que actualmente el sector se enfrenta a las siguientes problemáticas: energía, seguridad e infraestructura.
“A nosotros nos preocupa que a mediano y largo plazo México cuente con disponibilidad de energía, tanto en generación, como en transmisión”.
Con información de Reforma.