Aunado a la posibilidad de una fuerte desaceleración o incluso una recesión, México podría cerrar el año con una tasa de interés de 10.5% y una inflación de 8.5%, estimó el presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), Alejandro Hernández Bringas.
Indicó que las perspectivas del IMEF para la economía mexicana presentaron ajustes importantes de septiembre a octubre, pues el pronóstico de la inflación prevista para el presente año aumenta de 8.1 a 8.5% y para el 2023, de 4.8 a 5.0%.
Agregó que la tasa de interés subió de 9.75% en la encuesta de septiembre a 10.50% en octubre para el cierre de 2022, mientras que para el 2023 el aumento es de 9.13 a 9.75%.
“En la medida en que la inflación (en México) no ceda, la necesidad de una política monetaria más restrictiva seguirá vigente”, comentó Hernández Bringas.
Con información de Forbes