Los retos ante las nuevas tendencias para el cuidado del capital humano 

La pandemia y los estragos económicos y de salud que derivaron de ella trajeron nuevos retos para las empresas de México, y del mundo, como la adopción de nuevos esquemas de trabajo y tecnología para las labores de forma remota, así como una mayor conciencia del balance vida-trabajo. 

En este contexto, la introducción de la NOM-035 en México ha enfrentado diferentes situaciones, desde el desconocimiento por parte de las personas hasta la resistencia en algunos lugares. 

En este sentido, la directora de consultoría en compensación de AON México, Rocío Hernández, refirió que esta Norma Oficial Mexicana será permanente y actualmente se está en una fase de mantenimiento, que es seguir aplicando la segunda ronda de encuestas y actualizar los planes de acción para mitigar los factores de riesgo psicosocial en los espacios de trabajo. 

En entrevista con INCOMEX, destacó que otro factor que ha cambiado el panorama del mundo laboral en el país es la eliminación del outsourcing y la reglamentación de la subcontratación de servicios especializados. 

“Las empresas han estado reconfigurando sus objetos sociales. A veces tenemos empresas que tenían un grupo de 5 razones sociales y ahora les quedaron 3 o viceversa… han regularizado este tema de la contratación, llevando a sus nóminas principales a muchos de los colaboradores”, comentó. 

Indicó que otro de los retos es el pago de la participación de los trabajadores en las utilidades (PTU) ya con las nuevas reglas establecidas en la reforma en materia de subcontratación en cuanto al tope. 

“Hacia el 2023 veremos ya por fin el pago real del PTU porque en el 2022 se pagó el resultado del 2021 y en el 2021 muchos de los colaboradores estuvieron trabajando medio año con una nómina y otro medio año con otra nómina, entonces decimos que el impacto de todavía este cambio por la eliminación del outsourcing y los nuevos topes del PTU pues todavía les pegaron una mitad con una empresa y la otra con otra empresa, pero entonces hasta el 2023 es cuando tendremos la foto un poco más clara”, explicó. 

Otro reto importante es el pronóstico de los aumentos de sueldos para el 2023, sobre todo contemplando el nivel de la inflación de los últimos meses. 

“Las empresas han tenido que empezar a presupuestar 1 o 2% por arriba de lo que lo planeado, entonces si estábamos hablando de aumentos antes de esta alza de la inflación… hoy estamos hablando de 6.8 hasta un 7% de incremento a los sueldos”, dijo. 

Rocío Hernandez agregó que, si este tema se toca nuevamente en los próximos meses, seguramente se hablará según se desarrolle la inflación.