El 1 de julio de 2022 inicia la obligación de emitir los CFDI en su versión 4.0, que exige la incorporación de más datos, mismos que deben estar correctos para que la factura pueda ser timbrada al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Por esta razón, empresas, comercios y profesionales piden cada vez más la Constancia de Situación Fiscal (CSF), que contiene estos datos.
La académica de la Maestría en Impuestos de la Universidad Panamericana, Virgina Ríos, explicó que “los recibos que se emitan incompletos no podrán ser acreditables ni deducibles de impuestos para el receptor, según el artículo 29 A del Código Fiscal de la Federación (CFF)”.
Asimismo, enfatizó que según los artículos 83 y 84 del CFF, no expedir o entregar el CFDI con los requisitos que exigen el Código y el SAT puede derivar en mulas de ente 17 mil 20 y 97 mil 330 pesos. En caso de reincidencia puede haber clausura del negocio de 3 a 15 días.
Con información de El Financiero.
