En septiembre de 2022 iniciaría la construcción de la nueva garita internacional Otay 2, misma que operaría en 2024, ubicada ubicada unas tres millas al este de la garita Mesa de Otay. Este proyecto que se planeó hace más de veinte años ente Estados Unidos y México.
Del lado estadounidense, ya hay avances en la construcción de la Ruta Estatal 11, una vía de acceso que conectará la nueva entrada con las carreteras 94 y 125. La obra inició en diciembre de 2019 con una inversión de 565 millones de dólares (mdd), explicó Mario Orso, director del proyecto con el Departamento de Transporte de California (Caltrans).
Por su parte, la titular de la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano del Estado (Sidue) en Baja California, Karen Postlethwaite Montijo, informó que el proyecto tendrá un costo de 3 mil 200 millones de pesos (mdo), o bien, aproximadamente 173 mdd, que serán destinados a la construcción del acceso y compra de tierra.
Señaló que hay alrededor de 40 viviendas que serán retiradas e indemnizadas para la realización del proyecto. Recientemente las autoridades mexicanas consolidaron el derecho de vía en la zona que comprende el proyecto.
Otay Mesa 2 será un puerto con 10 carriles para vehículos ligeros y 10 para transporte de carga. No obstante, los carriles serán reversibles, por lo que podrán dar acceso al tráfico de mayor demanda, asegurando menores tiempos de espera que los otros puertos internacionales, comentó la funcionaria mexicana. Además será un puerto con peaje, el cual se cobrará con base en los tiempos de espera garantizados.
En tanto que Orso indicó junto con la Asociación de Gobiernos de San Diego (Sandag) trabajan con las autoridades mexicanas, ya que una tercera parte del proyecto se financiará con el ingreso que generará el peaje.
La gerente del proyecto con Caltrans, María Rodríguez Molina, dijo que este verano esperan los resultados de los estudios de ganancias y tráfico que arrojarán las cifras de lo que costará el paso por la nueva garita, el cual se cobraría del lado estadounidense.
Se calcula que el costo pueda variar entre 12 y 15 dólares para vehículos ligeros y hasta 20 o 25 dólares para camiones de carga.
Eso garantizaría un cruce con 20 minutos de espera y a su vez reducirá el tráfico en los otros dos puertos de entrada de la ciudad.
Postlethwaite destacó que el mayor beneficio es abatir el congestionamiento de vehículos para aligerar el impacto al medio ambiente, toda vez que generará un impacto positivo en la economía de la región; debido a velocidad para trasladar personas y mercancías, así como a su ubicación cercana al boulevard 2000 que corre hacia Popotla y el sur de la península y junto al entronque con la carretera de cuota hacia Tecate, que conecta con el resto del país.
Con información de San Diego Union Tribune.