El peso se cotizó en 23.46 unidades por dólar al cierre de la semana, con lo cual interrumpió una racha de 3 sesiones con ganancias después de que S&P rebajó la calificación crediticia de México y la de Pemex. También se reactivaron temores sobre el daño económico del Covid-19.
La divisa mexicana tuvo un avance semanal de 3.8% frente al billete verde, el mayor desde julio 2018.
S&P rebajó el jueves la calificación crediticia de México en moneda extranjera a largo plazo a “BBB” desde “BBB+” y mantuvo su perspectiva negativa (al igual que a la de Pemex), provocando que haya bajas a la nota soberana en los próximos 12 a 24 meses, en plena crisis del coronavirus.
En el mercado de deuda, el rendimiento del bono a 10 años bajó 20 puntos base a un 7.18%, mientras que la tasa a 20 años cedió 21, a un 7.75%.
Con información de Milenio.
