El Ministerio de Finanzas de China anunció la reducción de aranceles a partir del 1 de enero para una lista de 859 productos entre los que se incluyen alimentos, artículos de consumo y piezas para la fabricación de teléfonos inteligentes; con el fin de disminuir las barreras comerciales y estimular la demanda interna.
Según cálculos de Bloomberg, las importaciones de los artículos enumerados totalizaron alrededor de 389 mil millones de dólares (mdd) en 2018.
Cabe destacar que esta decisión no está directamente relacionada con el conflicto comercial que este país mantiene con Estados Unidos, pero respalda la afirmación del Gobierno de abrir aún más su economía mientras busca un acuerdo para cesar el enfrentamiento comercial que ha desencadenado una serie de aumentos arancelarios entre ambas economías.
Aunado a lo anterior, se prevé una desaceleración al 6% en el crecimiento económico para 2020, por lo que los mandatarios de ambos países tienen interés en reducir el costo de los bienes de consumo importados.
De acuerdo con El Economista, China ha estado reduciendo los aranceles de importación a bienes de consumo desde 2017, y agregó medicamentos para el asma y la diabetes a esa lista. También se incluyen sensores de cámara para teléfonos inteligentes, vidrio utilizado en pantallas de cristal líquido y pantallas de diodos emisores de luz orgánicos (OLED) para televisores y teléfonos inteligentes de alta gama, así como equipos de prueba y clasificación de semiconductores.
Por otra parte, el Gobierno introdujo nuevas medidas para apuntalar el sector privado, incluida la apertura de industrias previamente cerradas a inversores no estatales.
Apertura de la economía
El comunicado emitido por el Ministerio de Finanzas chino, señala que la lista permite aranceles más bajos para artículos que provienen de los miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC), así como para los países con mantiene acuerdos de libre comercio; las tarifas podrían reducirse aún más.
Asimismo, señala que el crecimiento de las importaciones de China se ha estancado en medio de una desaceleración más amplia de la economía, lo que ha favorecido el aumento del superávit comercial.
Con información de El Financiero.
