El Subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Jesús Seade, se reunirá este lunes con el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, para expresar su inconformidad a la tentativa de enviar cinco agregados laborales a su embajada en México, para supervisar la estricta implementación de la reforma laboral.
Esta medida era uno de los objetivos de los representantes demócratas en la negociación de cambios al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), pero las autoridades mexicanas aseguraron que en esta segunda negociación se logró evitar esta imposición a cambio de integrar paneles de resolución de conflictos a través de un mecanismo específico.
No obstante, la iniciativa de ley que se envió al Congreso de Estados Unidos para ratificar el T-MEC, propone en sus anexos enviar a cinco agregados para que monitoreen la implementación de la reforma laboral.
Seade, puntualizó que esta iniciativa no forma parte del Tratado acordado entre los tres países ni es fruto de la negociación trilateral.
Asimismo, explicó que las agregadurías están fundamentadas en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas (CVRD), misma que establece que el “Estado receptor”, en este caso México, podrá en cualquier momento y sin tener que exponer los motivos, señalar que cualquier miembro de la misión no es aceptable.
De acuerdo con Forbes, lo anterior significa que los agregados laborales que pretenda enviar el gobierno estadounidense a su embajada en México deberán contar con el visto bueno del gobierno mexicano, cuyos funcionarios ya han advertido que no permitirán la intromisión de inspectores estadounidenses en empresas mexicanas.
En tanto que la titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Luisa María Alcalde, en entrevista con El Financiero, negó que las modificaciones al T-MEC representen un riesgo de intromisión de Estados Unidos a México, por lo que rechazó que la política laboral se vaya a dictar desde ese país y que la inspección federal vaya a ser desplazada por verificaciones dentro de los paneles laborales.
Por su parte, Robert Lighthizer, en una carta dirigida a Seade, expone que los agregados no son inspectores laborales y no serán impuestos.
Según lo publicado por Excélsior, el funcionario norteamericano detalló que serán panelistas independientes quienes realicen las verificaciones y no los agregados.
Con información de Forbes, El Financiero y Excélsior.