México puede sacar provecho de la revisión de demócratas al T-MEC: Jesús Seade

El subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Jesús Seade, manifestó que la larga espera para la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) resultará positiva para nuestro país al traer beneficios que no se contemplaron originalmente en el tratado.

Actualmente, México está a la espera de la negociación entre la Casa Blanca y los legisladores demócratas, quienes demandan algunas precisiones al T-MEC, principalmente en temas que tienen que ver con lo laboral, el medio ambiente y la industria farmacéutica.

En entrevista con El Economista, Seade confirmó que estos ajustes serían resueltos a través de protocolos de enmiendas y adiciones pero México tiene claras las modificaciones que no aceptaría bajo ninguna circunstancia, como las inspecciones laborales estadounidenses.

Tales puntos fueron comunicados a la Casa Blanca a través de su representación comercial (USTR, por sus siglas en inglés). Si las charlas entre la USTR y los demócratas avanzan, pronto podría haber un acuerdo, pero primero habrá que revisarlo, comentó.

El funcionario aclaró que la apuesta de México, es que la USTR y los demócratas lleguen a un acuerdo antes del 28 de noviembre, cuando se celebre el Día de Acción de Gracias en ese país. En este contexto, el proceso de impeachment iniciado contra el presidente Donald Trump podría resultar un catalizador antes que un obstáculo.

Además, destacó que uno de los resultados positivos de esta charla para México es la reparación del mecanismo de solución de controversias del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y que permaneció con fallas en el T-MEC.

Esta corrección nació de la desconfianza de los legisladores demócratas acerca del cumplimiento de México de sus compromisos en materia laboral plasmados en el T-MEC. Si México no cumpliera, una posible vía para forzarlo sería abrir paneles laborales, pero los demócratas y la confederación de sindicatos AFL-CIO hicieron notar que bajo las reglas del T-MEC, abrir los paneles sería casi imposible, indicó Seade.

En este sentido, dio a conocer que en los 25 años del TLCAN, el número de paneles abiertos para solucionar diferencias en el seno del bloque ha sido muy bajo, pues basta con que uno de los países miembro omita nombrar a sus panelistas (jueces) para que el panel no se constituya, lo que bloquea de facto el mecanismo.

Para eliminar este problema, se propuso establecer mecanismos para garantizar que no fueran bloqueados los paneles, pero sólo en materia laboral, a lo que México se opuso, pues quedaban fuera otros sectores de interés para el país como el agropecuario o el manufacturero.

Así, nuestro país consiguió que el tema se discutiera integralmente, es decir, que se abarcara la solución de controversias en todos los sectores. “De ser algo negativo esto evolucionó para ser algo muy positivo. Todavía no hay textos finales, pero ya queda como corrección del problema en su totalidad. Lo cual es un gran logro para México”, aseveró Seade.

Ahora, el T-MEC establece que si un país no nombra a los panelistas, los otros dos tendrían capacidad de nombrarlos para que el panel sea funcional.

USTR, aliada

El funcionario de la SRE reconoció al titular de la USTR, Robert Lighthizer, por defender al tratado y no ceder ante demandas inaceptables que los legisladores norteamericanos podrían proponer.

Además, la contrapropuesta mexicana en el tema de las inspecciones laborales estadounidenses fue fortalecer la supervisión laboral interna, a través de un sistema de denuncias anónimas con un organismo intermediario entre el denunciante y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), quien sería la encargada de hacer las inspecciones.

Otra medida sería una supervisión más detallada de los ministros del trabajo del T-MEC. Para ello, en vez de reunirse cada año, podrían reunirse trimestralmente durante los tres años que planteó México para implementar su reforma laboral.

Sobre los temas ambiental y farmacéutico, Jesús Seade estimó que los cambios promovidos por los demócratas son menores y, en teoría, conllevan menos complicaciones.

México debe acelerar plan de implementación del T-MEC

El diplomático mexicano puntualizó que México debe acelerar su plan de implementación del T-MEC, porque una vez ratificado en Estados Unidos y Canadá, su vigencia iniciará tres meses después y existen temas complejos que deben prepararse con la debida antelación, en particular en el aspecto laboral, en el que México se comprometió a aplicar en tres años su reforma del sector.

Jesús Seade indicó que un tema complejo será la implementación de las nuevas reglas de origen del sector automotriz, en donde no se sabe aún cómo se acreditará el cumplimiento.

Aunado a lo anterior, ejemplificó con el caso de la regla de uso de acero y aluminio, que marca una incorporación de 70% de producto regional en las exportaciones automotrices, pero hasta la fecha no se ha esclarecido si ese porcentaje se cumplirá por marca, por modelo automotriz o por planta armadora.

Con información de El Economista.