Si la visión de México estaba enfocada en trazar estrategias para aprovechar la guerra comercial entre Estados Unidos y China, tras la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas la postura cambió para concentrar los esfuerzos en evitar que esto se concrete.
Los aranceles tendrán una tasa inicial de 5% e irán aumentando gradualmente cada mes hasta alcanzar un 25% en octubre si no se contiene el flujo de indocumentados desde Centroamérica hasta la frontera entre ambos países.
Al respecto, el experto en comercio exterior, Luis Alberto Quiroz Martínez, considera que la entrada en vigor del 5% de arancel es inminente, salvo que el gobierno de México resuelva el problema migratorio en un día, cerrando la frontera sur de México a cualquier intento de inmigración ilegal, lo cual es imposible en tan poco tiempo.
Esto representa un grave problema para la industria de exportación ya que aproximadamente 7 de cada 10 productos que se obtienen, fabrican o ensamblan en México tienen por destino Estados Unidos; de los cuales al menos 5 son manufacturas de empresas maquiladoras de exportación, que en su gran mayoría son inversiones extranjeras instaladas en México de origen estadounidense.
En este sentido, señaló que el sector automotriz representa cerca del 10% del total de las exportaciones a EU con un valor aproximado de 30 mil mdd. Asimismo, el rubro de los equipos informáticos tendría afectaciones; marcas como Samsung, LG, Toshiba, Foxconn, Flextronics e Intel alcanzaron un valor de exportación de 19 mil mdd, aproximadamente un 6.3% de las exportaciones.
Quiroz también enlistó en los sectores que más resentirán los aranceles a los productos del campo, los teléfonos celulares y los televisores; que ocuparon el tercer, cuarto y quinto lugar en ganancias por exportación a Estados Unidos, que en 2018 alcanzaron un valor de 328 mil mdd. “A partir del 10 de junio, paradójicamente, en la región más consolidada de apertura comercial y de inversión del mundo, dará inicio a una era comercial cerrada en medio de las ratificaciones del T-MEC. Soplan vientos de cambios, habrá que estar atentos a las decisiones de política comercial internacional y particularmente al twitter”, concluyó Quiroz Martínez.
