¿”Primero México y luego el extranjero” o “Primero China y luego México”?

El pasado 3 de febrero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, en gira de trabajo por Veracruz dijo que revisará los acuerdos de la venta de azúcar al extranjero y los permisos que se dieron para utilizar edulcorantes que vienen de otros países, en un marco de respeto a los acuerdos de libre comercio, pero dando prioridad al productor mexicano.

Varios industriales le aplaudimos al presidente que textualmente haya dicho: “Sí queremos el libre comercio y respetaremos los acuerdos, pero vamos a defender al productor nacional. Primero México y luego el extranjero”. El problema es que para su Secretaria de Economía, la Dra. Graciela Márquez Colín, primero no está México, sino China, por lo que no ha atendido la instrucción presidencial.

Hay que recordar que al sector mexicano de la moda, conformado por las industrias del calzado, vestido y textil les dijo algo similar en el marco de la reunión de Consejo de la CONCAMIN, el pasado 9 de julio de 2018. Las palabras textuales de López Obrador fueron: “en cuanto a la industria del calzado, pues son de los sectores prioritarios para nosotros…toda la industria textil y la industria del calzado.”

Después de este anuncio en favor de la industria mexicana de la moda, me consta que diversos empresarios se han comprometido con la estrategia del presidente, en particular con la de llevar empleos al sur de país. Se han realizado viajes exploratorios por parte de industriales del calzado, con el fin de establecer fábricas en los estados de Oaxaca y Yucatán.  De igual manera, después de que el presidente dijo que el calzado y textil serían prioritarios para su gobierno, diversos fabricantes han realizado inversiones para aumentar su capacidad de producción, tanto para el mercado interno como para la exportación.

Sin embargo, estos anuncios del presidente, en el sentido de “Primero México y luego el extranjero”, una versión tropicalizada del America First de Donald Trump, pues se topan con pared ante las acciones llevadas a cabo por la Secretaría de Economía.

Como se ha señalado desde este espacio, y decenas de notas periodísticas, la Secretaría de Economía tuvo la oportunidad de posponer o cancelar la última fase de la desgravación arancelaria decretada unilateralmente por México en 2008. El día límite para haber publicado un Decreto Presidencial para evitar que los aranceles máximos cobrados a las importaciones de textil, vestido y calzado pasara de un máximo de 30% a un máximo de 20% fue el 30 de enero de este año.

Ante el daño que la baja arancelaria causará, la molestia de fabricantes y líderes empresariales, y el enojo de prominentes miembros del gabinete del presidente López Obrador, es que la Secretaría de Economía citó a los sectores afectados a reuniones, a llevarse a cabo el viernes 8 de febrero, con el fin de abordar el impacto que esta decisión de la Secretaría de Economía tendrá en la actividad económica. Cabe señalar que cada sector fue citado por separado, supongo que para evitar reclamos mayores.

A dicha reunión acudimos, por parte del sector calzado, el Lic. Luis Gerarado González García, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Guanajuato ((CICEG) y de la Cámara Nacional de la Industria del Calzado (CANAICAL); el Lic. Thomas Alfred Trivilino Reed, Secretario de ambas cámaras; el Lic. Mauricio Battaglia Velázquez, Vicepresidente de PROSPECTA de CICEG; el Lic. Roberto Plasencia Torres, Consejero de CICEG; y su servidor, en carácter de presidente ejecutivo de ambas cámaras.

Llegamos puntualmente a la reunión, la cual comenzó a la 1.30pm y concluyó a las 3.00pm. La Secretaria Márquez se hizo acompañar por el Subsecretario de Industria y Comercio, el Dr. Ernesto Acevedo; por el Director General de Industrias Ligeras, el Mtro. Héctor Hernández; el Director General de la Unidad de Prácticas Comerciales Internacionales (UPCI), Mtro. Víctor Aguilar; por el Director General de Comercio Exterior Subsecretaría de Industria y Comercio, Mtro. Juan Díaz Mazadiego; y por el Dr. Marcos Ávalos, Coordinador de Asesores de la Secretaria de Economía. Previo a la reunión, a los representantes de calzado, nos solicitaron dejar fuera los celulares, por lo que no hay ni una foto de dicha reunión.

La Dra. Márquez comenzó dando la bienvenida y nos pidió que le presentáramos el material que llevábamos preparado. Le explicamos qué es la industria del calzado y las múltiples razones que justificaban haber mantenido los aranceles máximos en el nivel de 30% (de lo cual escribí en este espacio hace una semana). Le manifestamos a la Dra. Márquez cuáles serán las afectaciones de su decisión, las cuales les comparto brevemente a continuación:

  1. De acuerdo a un estudio econométrico para anticipar el daño que sufrirá la industria nacional del calzado por el incremento de importaciones, se puede anticipar una clara afectación a la industria ya que el coeficiente de correlación entre el volumen de pares de calzado importados de China y su precio promedio (para el periodo de enero de 2009 a diciembre de 2018) es de -0.79. Este es a todas luces elevado e indicativo de que a menor precio de importación, mayores serán las compras de calzado asiático, en especial de China.
  2. Le mostramos gráficos en los que se puede apreciar claramente como en la medida en que el precio promedio de las importaciones de calzado originarias de China ha disminuido, el volumen de importaciones (en pares) ha aumentado considerablemente. De esta manera, la baja arancelaria de entre 5 y 10 puntos porcentuales (que se traduce en un menor precio final de importación) ocasionará sin duda un alza en la cantidad de pares importados.
  • Presentamos la evolución de las importaciones totales de calzado, en donde se aprecia que en el periodo de 2015 a 2018 éstas aumentaron de manera considerable. De hecho, la tasa de crecimiento promedio de las importaciones en el periodo es de 6.76%, pero con una evidente tendencia a aumentar (fue de 10.59% en 2018). El modelo econométrico que elaboramos muestra que este año se superará la tasa de crecimiento de las importaciones en 2014, la cual fue de 17.81%.
  • Le comentamos que también se debe reconocer que los precios promedio de venta de calzado (valor de la producción dividido entre el número de pares producidos, según reportes de la Encuesta Mensual de la Industria manufacturera de INEGI) por parte de los fabricantes, han estado prácticamente estancados en términos reales desde el año 2012 en torno a los 230 pesos por unidad. Esta situación, aunada a la inflación en costos de producción ha ocasionado que los márgenes de rentabilidad de las empresas fabricantes se hayan erosionado de manera importante en los últimos seis años, siendo ahora dichos márgenes de entre el 5% y el 8%. Es por esta razón que una disminución de entre 5 y 10 puntos porcentuales en los aranceles máximos NMF para el sector calzado, pudiera convertirse en el puntapié para que varias empresas opten por cerrar sus puertas. Esta situación se explica porque los grandes comercializadores de calzado (se estima que los 20 mayores comercializadores controlan más del 75% de la venta de calzado en México) tienen precios meta para sus aparadores, entonces con la baja arancelaria tendrán elementos para presionar al fabricante mexicano de calzado a venderle sus productos entre un 5 y 10% más baratos o de lo contrario compraran producto asiático.

Al estar concentrada en pocos jugadores la venta de calzado, los grandes comercializadores no tienen incentivo para bajar precios en beneficio del consumidor (de alguna manera podemos asumir que el comportamiento de la curva de demanda está quebrada como en el caso de algunos oligopolios), pero si tienen elementos para exigirle precios más bajos al ya de por si castigado productor.

  • Dado todo lo anterior, anticipamos en un escenario base que la baja arancelaria ocasionará un incremento de las importaciones totales en 2019 de entre 20% y 25%, lo que llevaría al volumen total de pares importados este año a un total que oscilaría entre 116.9 millones y 121.77 millones de unidades. Si asumimos una productividad promedio de la mano de obra de 8 pares por persona al día, el incremento pronosticado de las importaciones ocasionará la pérdida de entre 9,700 y 12,200 puestos de trabajo.

Es innegable que la industria nacional del calzado sufrirá las consecuencias de tener un costo-país más elevado que China, Vietnam e Indonesia.

¿Qué dijo la Secretaria Márquez ante la contundencia de estos datos? Pues básicamente se limitó a decir que la decisión de no haber detenido la baja arancelaria se tomó con una perspectiva de no analizar casos aislados, sino con una visión integral de toda la industria. Dijo que la decisión fue del Gobierno Federal y que se consultó con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con la Oficina de la Presidencia y con el propio presidente López Obrador; y que se había presentado el caso al gabinete. Nos dijo que el mundo ha dado un giro proteccionista y que en áreas de garantizar el acceso de los productos mexicanos a los mercados globales, por eso se decidió no detener la baja de aranceles al 20%. Si, hubo también compromisos de la Secretaria en cuanto a redoblar la lucha contra el contrabando y la subvaluación, apoyar en la elaboración de casos/denuncias en contra de aquellas grandes cadenas comerciales que realizan prácticas depredatorias en contra de los fabricantes de calzado, y quedó latente la posibilidad de que una vez que se haya documentado el aumento de importaciones y el correspondiente daño, se pueda armar un caso antidumping en contra de China, Vietnam e Indonesia.  Sin embargo, respeto al tema fundamental, que es la baja arancelaria ahí no se pudo hacer nada.

Ante este señalamiento, el presidente de CICEG y CANAICAL, Luis Gerarado González, le recordó que esta baja arancelaria fue unilateral, que no recibimos nada a cambio de ningún otro país, que no forma parte de ningún tratado internacional y que sólo entregamos nuestro mercado. En ningún momento el sector calzado pidió subir aranceles, la petición fue que no los bajaran. Ante esto la Secretaría sólo atinó decir que la decisión fue bien pensada y que fue del Gobierno Federal, no de ella.

Una vez concluido este tema, como industriales de calzado, le presentamos a la Secretaria y a su equipo de trabajo la agenda de trabajo que la industria quiere impulsar con la Secretaria de Economía en 2019. Por razones de espacio, no la puedo desarrollar en este momento. Pero si quisiera destacar pues que es evidente que el Presidente de la República habla de que los mexicanos somos primero, que habrá sectores prioritarios por su alta capacidad de generación de empleos, pero la Secretaría de Economía no comparte esta visión y para ella es más importante quedar bien con los chinos, antes de apoyar en los hechos lo que el presidente de la República menciona en sus discursos, pero habrá 12 mil trabajadores de la industria del calzado, que probablemente perderán su empleo en 2019, que le recordarán su falta de apoyo.

Alejandro Gómez Tamez*

Director General GAEAP*

alejandro@gaeap.com

En Twitter: @alejandrogomezt